
La luna es más que un satélite, para todos aquellos que sentimos y expresamos un sexto sentido hacia todo lo mágico y esotérico. A medida que nos vamos volviendo más sutiles en nuestras percepciones, más sentimos la influencia de la luna, como nos influye la fase en la que se encuentra y los signos lunares por los que pasa. Igual que rige el ciclo de las mareas, las cosechas, la siembra, el ciclo femenino, los nacimientos…, rige nuestro mundo emocional. El agua es la metáfora de las emociones y nuestro cuerpo es más de un 80% agua. Así pues, la luna, rige nuestro mundo emocional, sentimientos, sensibilidades, percepciones, intuiciones, videncia, sueños (dormidos y despiertos), y nuestra espiritualidad...
Es por ello necesario recalcar la importancia de tener un calendario lunar siempre a mano, para tener en cuenta a nuestra Diosa madre Luna y su paso por el cielo, a la hora de hacer nuestros rituales. Hay una fase de la luna que se llama vacía de curso, y se produce cuando la luna sale de un signo para ingresar en otro. No es recomendable entonces hacer rituales, pues no hay energías que lo apoyen.
Las tres fases de la Diosa, están representadas por tres mujeres en las distintas fases de la vida, niña, mujer y anciana y que significan respectivamente:
LUNA CRECIENTE: Desde la luna nueva hasta la luna llena. Este momento es apropiado para realizar rituales de curación, de magia positiva, potenciar aquellas cosas que queremos que crezcan en nuestra vida, como el amor, la buena suerte, etc.
LUNA LLENA: Muy propicia para todo lo relacionado con la videncia y nuestro mundo intuitivo. La luna llena los potencia especialmente. Favorece todo lo que tenga que ver con fertilidad y nuestras habilidades extrasensoriales, así como podemos tener sueños proféticos, o que sean particularmente intensos en esta fase.
LUNA MENGUANTE: Desde la luna llena hasta el la luna nueva. Como su propio nombre indica, ideal para trabajar todo aquello que deseamos que “mengüe” en nuestra vida. Viejos hábitos, costumbres que ya no nos apoyan, relaciones que ya no nos aportan, quitar negatividad, adicciones…
Aquí están sus fases y los aspectos que favorece:
1-Todos los hechizos y rituales que atraen deben realizarse cuando la Luna está en su fase ascendente o creciente. Todos los hechizos y rituales que eliminan deben realizarse cuando la Luna está en su fase descendente o menguante.
2-Todos los rituales que implican al elemento fuego deben efectuarse cuando la Luna se encuentra en uno de las tres signos astrológicos de fuego: Leo, Aries y Sagitario.
3-Todos los rituales que requieren al elemento tierra, deben realizarse cuando la Luna se encuentra en uno de los tres signos astrológicos de tierra: Tauro, Virgo y Capricornio.
4-Todos los rituales que incluyen el elemento aire deben realizarse cuando la Luna se encuentra en uno de los tres signos astrológicos de aire: Géminis, Libra y Acuario.
5-Todos los rituales que implican el elemento agua deben realizarse cuando la Luna se encuentra en uno de las tres signos astrológicos de agua: Cáncer, Escorpión y Piscis.
La Luna en los signos:
LA LUNA EN ARIES: Favorece la autoridad, el liderazgo, poder de voluntad, empeños guerreros y conversiones espirituales o el renacimiento. También apropiada para realizar rituales de curación en caso de malestares en la cara, cabeza o cerebro.
Ideal para cosas que tienen que activarse rápidamente. Colores tradicionales de velas: rojo, encarnado, escarlata, borgoña. Metal tradicional: hierro. Espíritus elementales: salamandras.
LA LUNA EN TAURO: Aconsejable para practicar todo tipo de magia para el amor y realizar rituales para favorecer bienes raíces, adquisición de tipo material y dinero. También es la fase lunar apropiada para realizar rituales de curación de malestares de la garganta, cuello u oídos. Realizar rituales para la belleza física, embellecer nuestro entorno. Colores tradicionales de velas: todos los tonos de verde, rosa o turquesa. Metal tradicional: cobre. Espíritus elementales: gnomos.
LA LUNA EN GÉMINIS: Realizar rituales que ayuden a la comunicación, cambios de residencia, escribir, actividades de relaciones públicas y viajes. También favorece los rituales de curación para malestares en hombros, brazos, manos o pulmones. Colores tradicionales de velas: malva. Metal tradicional: mercurio. Espíritus elementales: sílfides.
LA LUNA EN CÁNCER: Indicado para celebrar rituales que honren a las deidades lunares y favorece todo lo relacionado con el hogar y todos los aspectos de la vida en familia. También realizar rituales de curación para malestares en el pecho o en el estómago. También realizar rituales para protección de los niños de la familia. Con la luna en cáncer y en fase menguante hacer rituales para sanar las relaciones con las mujeres de la familia. Colores tradicionales de velas: plateada, gris, blanca. Metal tradicional: plata. Espíritus elementales: ondinas.
LA LUNA EN LEO: Realizar rituales que favorezcan la autoridad, reafirmarnos en nuestro propio poder, valor, fertilidad y el nacimiento. Favorece la pasión tanto en relaciones como en cosas en las que creamos. También es la fase lunar apropiada para realizar rituales de curación en caso de malestares en la parte superior de la espalda, en la espina dorsal o en el corazón. Colores tradicionales de velas: dorado, amarillo, naranja. Metal tradicional: oro. Espíritus elementales: salamandras.
LA LUNA EN VIRGO: Favorece aspectos de empleo, asuntos intelectuales, la salud y preocupaciones dietéticas. También es la fase lunar apropiada en la que pueden realizarse rituales de curación en caso de malestares en los intestinos o en el sistema nervioso. Favorece el orden y la disciplina, el trabajo bien hecho y en silencio. Colores tradicionales de velas: azul marino, naranja. Metal tradicional: mercurio. Espíritus elementales: gnomos.
LA LUNA EN LIBRA: Favorece los trabajos en el ámbito artístico, la justicia, pleitos en tribunales, asociaciones y uniones, la estimulación mental y el equilibrio kármico, espiritual o emocional. Favorece los encuentros amistosos, y la diplomacia. También es la fase lunar apropiada para realizar los rituales de curación en caso de malestares de la parte baja de la espalda o los riñones. Colores tradicionales de velas: azul royal. Metal tradicional: cobre. Espíritus elementales: sílfides.
LA LUNA EN ESCORPIÓN: Favorece nuestra libido, asuntos sexuales, el poder, el crecimiento psíquico, los secretos y las transformaciones fundamentales. También es la fase lunar apropiada para efectuar los rituales de curación de malestares en los genitales y órganos reproductores. Colores tradicionales de velas: rojo, negro. Metal tradicional: hierro. Espíritus elementales: ondinas.
LA LUNA EN SAGITARIO: Rituales que favorecen a los caballos, los viajes, las publicaciones, los asuntos legales, actividades deportivas y la verdad, tiene que ver con la maestría interna y por supuesto con nuestros maestros espirituales. También es la fase lunar en la que pueden realizarse rituales de curación en caso de malestares en el hígado, los muslos y en las caderas. Colores tradicionales de velas: púrpura, azul oscuro. Metal tradicional: estaño. Espíritus elementales: salamandras.
LA LUNA EN CAPRICORNIO : Se ven implicados la organización, la ambición, el reconocimiento, las carreras profesionales y los asuntos de política. Las cualidades a trabajar aquí son la tenacidad, y la visión práctica. También es la fase lunar apropiada para realizar rituales de curación en caso de malestares en las rodillas, los huesos, los dientes o en la piel. Colores tradicionales de velas: negro, marrón oscuro. Metal tradicional: plomo. Espíritus elementales: gnomos.
LA LUNA EN ACUARIO: Favorece todo lo novedoso, científico, la libertad, la expresión creativa, la resolución de problemas, las habilidades extrasensoriales, la amistad y el abandono de malos hábitos o adicciones perjudiciales. También es la fase lunar apropiada en la que pueden realizarse rituales de curación en caso de malestares en las pantorrillas, los tobillos o en la sangre. Colores tradicionales de velas: azul claro. Metal tradicional: uranio. Espíritus elementales: sílfides.
LA LUNA EN PISCIS: Trabajo con los sueños, la clarividencia, la telepatía, la música y las artes creativas, todo aquello que enriquece nuestro espíritu. También es la fase lunar apropiada para realizar rituales de curación en caso de malestares en los pies o en las glándulas linfáticas. Colores tradicionales de velas: aguamarina, lavanda, esmeralda. Metal tradicional: estaño. Espíritus elementales: ondinas.
Los espíritus elementales son aquellos seres que están compuestos de un solo elemento, sea fuego, agua, tierra o aire.
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