jueves, 22 de enero de 2009

Viaje a Sedona.



Amigos lectores del blog:


Os describo en este artículo mis experiencias vividas en Sedona, un lugar mágico de Arizona.

En Sedona confluyen dos tipos de turismo, el de las Bellas Artes y el del Arte esotérico. Para mi fue una sorpresa encontrar tanto espacio y personas dedicadas a diferentes sistemas de sanación y ayuda. Pensé que allí no me distinguía en absoluto, me integraba perfectamente. Lectores de Tarot había para parar un carro. Bueno, aquí también, solo que estamos más dispersos en el mapa...En cuanto a galerías de arte había bastantes y muy distinguidas.

Una de las cosas que más me gustó fue lo bien que me sentí a nivel físico, y es que Sedona es un lugar de mucha energía. La rodean un sistema de fantásticas rocas que reciben nombres como Bell Rock o Cathedral Rock... y son sitios de peregrinaje para todos aquellos que desean sentir la energía del lugar a otros niveles. En ambas rocas tuve experiencias muy bonitas pues hay vórtices de energía y hasta la flora y arboleda del lugar crecen de forma diferente. Parece que si haces tu casa sobre un vórtice de energía sin saberlo, no puedes vivir mucho tiempo allí, pues no descansas bien...

Conocí personas muy especiales. Resalto la amabilidad y el agrado con que todo el mundo nos atendía. Aprecié la cualidad de la amabilidad como una cualidad espiritual, del alma, que va más allá del querer ser cordial con un posible cliente, sino como hacerte fácil tu estancia allí, hacer que todo fluyera bien, y como me dijo mi maestro Eric, "Si, es cierto, aquí todo el mundo es muy amable, porque hace lo que le gusta". Eso hizo que se me encendiera la bombilla, que cayera en la cuenta de que es cierto, que cuando hacemos lo que nos gusta, todo es un disfrute y todo es es como más fácil. Como Crystal, que hacía música sagrada con cuencos de cuarzo...Se puede hacer tanto bien con el arte, sea cual sea su expresión, es sanador. Con su música te trasladabas a otro lugar, más elevado. Y me hicieron la activación del Adn, técnica por mi desconocida. Lo que sentí fue muy mágico, me pareció semejante a una sesión de reiki muy intensa. Es algo en lo que tengo que profundizar, pero lo que noto a nivel físico y energético es como menos resistencia a hacer las cosas y hago mis asuntos más prontamente.

El color de la tierra es de un rojizo muy bello, el río Ocreek, me trajo visiones de otras épocas, de indios que eran soberanos en aquellas tierras, de otro tiempo de pureza y naturaleza intensos.

Pasamos allí el popular día de Acción de Gracias. Fue una agradable experiencia y la otra Crystal, la compañera de Eric, hizo un pavo delicioso, que aún me deleito de gusto...

También visitamos el Gran Canyon, y la sensación fue diferente, pues allí había a la vez, grandeza y silencio, un silencio que nace de la emanación de los antiguos dioses que poblaban la tierra. Tuve decepción al ver a los indios propietarios de aquello, como en una visión limitada explotan el lugar sin gracia ninguna. Pero me quedo con ese silencio que grita desesperado reclamando ocupar su lugar, el retorno de los dioses...

Contemplé minerales muy bellos y especiales y conecté con las rocas...Es un lugar donde el tiempo fue breve pero intenso, parecieron más días de los que realmente fueron. A menudo mi pensamiento conecta con Sedona y su energía, y una sonrisa viene a mi rostro, aprendí mucho allí, pero lo bueno es que lo traje conmigo y ahora se que llevo a Sedona en mi corazón...

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